Nuestra obra sigue el legado de San Vicente de Paul, y está abierta a todas las personas, cualquiera sea su credo o religión.
Hoy en día gracias a la obra, los ancianos puedan disfrutar una vejez digna y tranquila, los niños tienen una permanencia en el ámbito educativo y obtienen herramientas para su vida futura, y las niñas del hogar vuelven a creer en sí mismas, sintiéndose queridas y respetadas.
La continuidad de la obra es posible gracias a las donaciones de empresas, particulares y a la organización de actividades solidarias (cenas, bonos contribución, conciertos, etc), y a los ingresos producidos por nuestra casa de regalos www.dacregalos.com y por la explotación de una playa de estacionamiento propia. También contamos con la ayuda de un grupo de voluntarios que, en las diferentes áreas, colaboran donando su tiempo y poniendo su capacidad profesional al servicio de las obras de DAC.
Damas de Caridad de San Vicente de Paul.
MAS DE UN SIGLO MEJORANDO LA VIDA DE LOS QUE MAS NECESITAN.
Muchas gotas de agua, tienen la capacidad de formar la inmensidad de un océano. Tus manos tienen la capacidad de mejorar la realidad.
Tenemos un sueño que es la causa por la que trabajamos en equipo bajo el legado de San Vicente de Paul. Mediante un modelo de transformación llevamos adelante esta gran obra.
2500 niños, 600 colaboradores y más de 50 abuelas reciben atención diaria, educación, contención y afecto mediante la Misión DAC.